La catedral del motociclismo estrenaba nuevo trazado en el que se reducía la distancia original del circuito, renunciando a la velocidad punta y apostando fuertemente por la técnica.
Los nuestros se subieron al podio en todas las categorías siendo de destacar la victoria que consiguió Jorge Lorenzo en 250 cc., el cual dominó la carrera de principio fin con una buena salida saliendo desde la primera posición y marcando el tempo de la carrera de manera magistral como solo los grandes saben hacer. Únicamente De Angelis y Do vicioso pudieron mantener contacto visual y digo esto porque en ningún momento le cogieron la aspiración.