El esperado partido fue un paseo triunfal para el Barcelona, que supo leer el partido y remontar un encuentro que se puso muy cuesta arriba cuando a los treinta segundos Benzema marcó el primer tanto. El Real Madrid pudo sentenciar el encuentro, pero no supo rematar a un Barcelona que estaba drogui en esos momentos, y que despertó en el minuto 20, cuando fiel a su filosofía, cogió el balón y comenzó a mandar en el centro del campo.
Pep Guardiola demostró que sabe algo más de estrategía que Mourinho, porque viendo que el partido no estaba claro, que la pelota no la tenían, mandó a Iniesta a bajar al medio del campo, y comenzaron a jugar mucho mejor, hasta el punto que el Real Madrid no presionaba y se echaba más atrás de lo que habían hecho en los partidos anteriores.
Alexis Sánchez aprovechó que Coentrao se quedó colgado tirando el fuera de juego, para marcar el gol del empate en un tiro cruzado. En el segundo tiempo, y después de la polémica de la falta de Messi, que le podía haber costado la segunda amariila, llegó la mejor versión del Barcelona, aunque tuvieron suerte, al encontrarse un gol de Marcelo en propia puerta y un cabezazo de Cristiano Ronaldo, que no se supo porque se había marchado fuera, y justo después, una jugada de contragolpe, sirvió para que Cesc Fabregas, que le volvió a ganar la espalda al defensa portugués, pusiera el defintivo 1-3.
El Barcelona consiguió ganar el clásico dándo un baño de futbol y goles al Real Madrid, Benzema adelantó al madrid y Alexis Sanchez, Marcelo en propia puerta y Cesc marcaron