El FC Barcelona no jugará la final de la UEFA Champions League el próximo 21 de mayo en Moscú tras perder por 1-0 contra el Manchester United FC en el partido de vuelta de las semifinales de la UEFA Champions League disputado en Old Trafford.
Durante todo el partido los de Rijkaard tuvieron un claro predominio y posesión del balón, pero los ingleses fueron más efectivos. Se acercaron menos veces a la portería pero cada vez que lo hacían temblar las esperanzas culés.
Los primeros minutos fueron de total dominio del Barça mientras que el Manchester parecía confiar su suerte a la contra. Sin embargo, en el minuto 14, en una jugada aislada, el veterano y hombre de confianza de Ferguson, Paul Scholes, se sacó un potente disparo desde fuera del área para batir a Víctor Valdés y poner por delante en la eliminatoria al campeón inglés. Este tanto dejó dubitativo al Barça, que pudo empatar cinco seis minutos después, cuando Messi, tras jugada personal, obligó a Edwin Van der Sar a emplearse a fondo con un tiro desde la frontal del área.
Sobrepasado el ecuador del primer acto, el Barça buscaba la reacción por medio de su hombre más peligroso, Messi, ya que hasta el momento Eto’o no daba señales de vida. Mediando la primera parte, el Barça gozó de dos buenas ocasiones para empatar por mediación de Deco, que con sendos disparos desde lejos, pudo batir a Van der Sar. A falta de cuatro minutos para el final del primer tiempo, el United puedo hacer el 2-0, cuando un centro desde la izquierda de Ji-Sung Park fue rematado de cabeza por Nani desde dentro del área marchándose el remate desviado por muy poco de la meta de Valdés. Con esta acción se llegó al final de la primera parte, en la que el Barça no se mereció marchar perdiendo, aunque demostró una alarmante falta de pegada.
La reanudación del partido llegó con la intención de los blaugranas de mantener el balón en su poder y poder marcar el gol que los metiese en la final. Los aficionados, esperaban ese gol, el entrenador, el presidente, los jugadores esperaban ese gol, pero no llegó. Sí llegaron más ocasiones, sí llegó Henry y el joven Bojan, e incluso Gudjonsen a 4 minutos del pitido final, pero nada bastó.
El Barça se queda sin opción a la única competición a la que podía aspirar. El segundo año sin títulos trae consigo una crisis que será dificil de superar en Camp Barça.
La otra cara de la moneda es el Manchester United, que tiene asegurada una plaza en la final de Moscú. Esta noche conocerá a su rival para una final que se hablará en inglés: Liverpool o Chelsea.
Fuente: Uefa