La Europa League dio el pistoletazo de salida en el día de ayer con la disputa de todos los partidos de la primera jornada de la liguilla, donde estaban inmersos los equipos españoles del Valencia, Sevilla y Betis, equipos que no tuvieron la misma suerte y donde el Valencia fue el más perjudicado al caer en casa por tres a cero ante el Swansea, resultado que hizo saltar las alarmas del equipo Ché y que acabó con la paciencia de sus seguidores.
Por parte de los otros dos equipos españoles, el Sevilla logró una importante victoria en campo rival ante el Estoril, mientras que el Betis cosechó un empate ante el Olympique de Lyon, resultado que sabe a poco por las muchas ocasiones que tuvo el conjunto bético.
El Valencia, tras un inicio de campaña regular, tenía puestas muchas esperanzas en el debut de esta competición, pero todo se convirtió en pesadilla tras la expulsión de Rami en el minuto 9 de partido. A partir de ahí, el Valencia desapareció y el conjunto inglés se hizo dueño y señor del encuentro. Los goles de Wilfried, Michu y De Guzmán, dieron el triunfo a los de Laudrup, y dejó en la cuerda floja a Djukic.
El Betis era quien se enfrentaba al rival más duro, el Lyon francés, pero supo jugar sus cartas y tuvo el partido en sus manos con claras ocasiones de Cedrick y Chuli, que no supieron batir al portero rival. Este empate dejó un sabor agridulce pero con la sensación de que pueden plantar cara a cualquier rival.
El que mejor fortuna tuvo en su estreno en Europa fue el Sevilla, que se enfrenta al rival más fácil, el Estoril, un equipo inferior al conjunto hispalense pero que no puso las cosas fáciles a los de Emery. Los goles de Vitolo y Gameiro dieron la victoria a los sevillistas, que sólo corrieron peligro tras el gol del empate por obra de Bruno Miguel.