El Madrid no ha podido hacer un negocio mejor con el delantero argentino Higuaín, porque lo fichó cuando era una promesa del River Plate, también es decir que en su día Ramón Calderón pagó un pellizco por él, pero la cabezonería del delantero ha servido para revalorizar su precio y encima demostrar que quiere la camiseta blanca, porque podía haberse ido en casi todas las navidades, pero él cabezón, decía que quería triunfar y a día de hoy tiene todas las condiciones para hacerlo.

El delantero está en estado de gracia, porque cada balón que toca va a puerta y en la mayoría de veces acaba en la red, y es que este año ha perdido la fama esa que le perseguía desde que fichó por el Madrid, ya que le decían en el vestuario el «igualito», porque lo comparaban con Ronaldo, pero ahora es imprescindible.

En estos momentos el argentino vale muchos millones y no creo que el Madrid piense en venderlo, y eso que con la llegada de Benzema parecía que se iba a quedar fuera, pero no solo le ha quitado el puesto a Raúl, sino que el francés está cuestionado por su culpa, y es que este sábado volvía después de una lesión, jugó unos minutos y acabó marcando el tercer gol de su equipo.