Athletic de Bilbao 0 – 3 Werder Bremen
Un Athletic de Bilbao repleto de chavales y algún que otro veterano salió ayer al cesped de San Mamés para hacer frente al Werder Bremen, que no se achantó ante la frescura de los benjamines del equipo. Obligado por las bajas y las necesidades del equipo, Joaquín Caparrós alineó a los jóvenes de la cantera para disputar este partido, de todas formas poco se jugaban ya que con la clasificación en el bolsillo la duda posible era si quedarían primeros o segundos de grupo.
Sí sirvió para darles minutos en el campo, para darles una ayudita de experiencia y confianza, pero con hombre «hechos y derechos», y además alemanes, es difícil jugar. A los pocos minutos del encuentro los alemanes se adelantaron en el marcador, y en apenas media hora sentenciaron el partido: Pizarro (13′), Naldo (20′) y Rosenberg (36′), por este orden, marcaron los tres goles sentenciando el encuentro en poco más de media hora.
Poco o nada pudieron hacer los bilbaínos, además con un Muniaín asediado y acosado a golpes, zancadillas y codazos. Muchos miedos le tenían los alemanes como para dejarlo jugar. Así las cosas, el Atlétic de Bilbao pasa a la fase de Dieciseisavos donde se tendrán que emplear a fondo pues llegan los repescados de Champions y esto dejará de ser un juego de niños.
Imagen: Web Athletic de Bilbao
