Este fin de semana se vieron tarjetas de la discordía, tarjetas que fueron provocadas para sumar la quinta amarilla y tener un partido de sanción, y todo porque dentro de dos semanas llega el gran derbi, el partido que puede decidir la liga, y los entrenadores de Madrid y Barcelona no quieren arriesgarse a perder figuras claves en su once titular.
Primero fue Pep Guardiola quien pidió a Daniel Alves que retrasara el saque de banda, que fuera lento y amagara hasta en tres ocasiones buscando la pérdida de tiempo y la tarjeta amarilla, de esta forma sumaba cinco y cumplía el partido de sanción, algo parecido le pasó a Sergio Ramos, porque en los últimos minutos de partido, amagó con un saque de falta y al final vio la cartulina, como Xabi Alonso, que la buscó de forma equivocada en un balón dentro del área que le dio con la mano, provocando el penalti que a la postre daría el definitivo 3-2, pero el centrocampista no vio la amarilla y le tocó hacer una falta en el campo del Atlético de Madrid.
Ahora bien, si al Racing de Santander se le criticó y mucho porque ante el Barcelona fue sin sus tres pilares, Colsa, Munitis y Tchité, aunque éste último se pasó y vio la roja directa, provocaron la amarilla para no jugar ante los hombres de Guardiola, creo que también hay que hacer lo mismo con Daniel Alves, Sergio Ramos y Xabi Alonso.
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