El hospital madrileño Fundación Jiménez Díaz ha anunciado la incorporación de la prescripción de actividad deportiva controlada como una estrategia prioritaria en sus esfuerzos de promoción y prevención de la salud. Este paso se enmarca en una creciente comprensión de la comunidad médica de que el ejercicio físico es un pilar fundamental no solo para mantener una buena salud, sino también para mejorar la calidad de vida de aquellos que sufren de enfermedades crónicas. Junto a otros tres hospitales de la red pública de Quirónsalud en Madrid, la iniciativa busca integrar el ejercicio físico en el tratamiento convencional de diversas afecciones.
La decisión se sustenta en numerosas investigaciones científicas que destacan los múltiples beneficios del ejercicio regular. Estos beneficios van desde la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el alzhéimer y el párkinson, hasta la reducción del riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer. El deporte controlado también se ha asociado con mejoras en la capacidad cognitiva, el funcionamiento del aparato locomotor, y el control de afecciones como la hipertensión arterial y la diabetes. Además, los estudios indican que la inclusión de ejercicio regular en la rutina diaria puede reducir hasta en un 25% el índice de mortalidad.
El Dr. Óscar Gómez, director corporativo de Continuidad Asistencial de la red hospitalaria, subraya la efectividad del ejercicio físico comparándolo incluso con algunos tratamientos médicos. La importancia del deporte en la salud es indiscutible, afirmó, además de sus aplicaciones cardiovasculares y psicológicas, es indispensable para prevenir enfermedades crónicas al regular niveles de glucosa en sangre, optimizar el perfil lipídico y reducir la presión arterial, entre otros beneficios.
Para maximizar los beneficios del ejercicio, es esencial que este se adecue a las capacidades y condiciones de cada persona. La Fundación Jiménez Díaz recalca la necesidad de un plan progresivo y supervisado para aquellos con condiciones médicas específicas, mientras que promueve una rutina más dinámica para quienes poseen una mejor condición física.
El seguimiento personalizado es otro componente vital de esta propuesta. A través de un Portal del Paciente, se evalúa el cumplimiento de las recomendaciones médicas, permitiendo ajustar el programa de entrenamientos conforme a las respuestas de los pacientes. Esta medida facilita la identificación de posibles obstáculos y garantiza el apoyo necesario, fomentando hábitos saludables y sostenibles a largo plazo.
Con esta iniciativa, la Fundación Jiménez Díaz avanza en la promoción de estilos de vida activos y saludables, marcando un hito en la integración del ejercicio físico dentro del ámbito hospitalario y en el tratamiento de enfermedades crónicas.