Partido para olvidar el que disputó ayer el Barcelona en Munich frente a un Bayern que pasó por encima al equipo español. Hacía mucho tiempo que el conjunto dirigido por Tito Villanova no caía derrotado por un resultado tan abultado, que le deja prácticamente fuera de la final de Wembley salvo remontada histórica en el Camp Nou dentro de una semana.
Todo el mundo sabía que la eliminatoria no iba a ser sencilla, pero nadie se esperaba el debacle sufrido por el conjunto español, y es que aunque el Bayern de Munich es actualmente el equipo europeo en más en forma, nadie dudaba de la que el Barcelona tendría sus oportunidades.
El partido ya comenzó mal, ya que en el minuto 1 Ribery tuvo la primera gran ocasión para los alemanes, pero sólo una gran intervención de Valdés evitó que subiera al marcador el primer gol.
El Barcelona dominaba el balón, como viene siendo habitual, pero no tenía ideas para crear peligro, gracias sobre todo al gran trabajo defensivo realizado por Javi Martínez, Müller y Schweinsteiger que anularon por completo a Xavi, Iniesta y Busquest.
El primer gol llegó en el minuto 25 obra de Muller tras centro de Dante que supera por alto a Dani Alves. Se esperaba que el Barcelona reaccionara a este gol pero no fue así, y de esta forma se llegó al descanso.
En la reanudación, a los 4 minutos Mario Gómez lograba el segundo para los alemanes, tras rematar en fuera de juego un pase de cabeza de Muller. El colegiado no vio la acción ilegal y el gol subió al marcador a pesar de las protestas azulgranas.
El partido ya estaba roto y cada ataque alemán llevaban mucho peligro. Bartra tuvo en sus pies la opción más clara para el equipo español, pero su remate a la salida de una falta se fue muy desviado cuando estaba sólo ante Neuer.
En el minuto 72 Robben hacía el tercero para su equipo tras una gran jugada personal, y con la ayuda de Muller a Jordi Alba que lo hizo un bloque al más estilo baloncestístico, que el árbitro no contempló como falta. Diez minutos después Muller remata a placer una contra llevada a cabo por Alaba.
Los jugadores y técnicos españoles se quejaron del arbitraje ya que opinan que tres de los cuatro goles fueron ilegales, pero también el colegiado se comió dos claros penaltis por manos de Piqué y Alexis.
Dentro de una semana el partido de vuelta donde veremos si el Barcelona es capaz de remontar el resultado.
