Decepción brutal…

Casillas La selección española ha sido eliminada del mundial por una Francia que aprovechó dos momentos de debilidad. Por tanto la retirada de Zizou se prolonga, al menos, un partido más.

Los nuestros salieron a por todas incluso nos llegamos a poner por delante en el marcador, pero la veteranía de los galos, sobre todo en la mitad de la segunda parte, se dejó ver. La verdad que los nuestros no han estado a la altura en ciertos momentos, cosa que han aprovechado los franceses, de los cuales cabe destacar, que Henry hizo que a los linieres les salieran agujetas de tanto levantar el banderín. El delantero del Arsenal no hizo nada más que faltas y fueras de juego. Mal educado. Pero vimos a un impresionante Zidane y a Ribery, un jugador hasta ahora poco conocido, que con sus conducciones se clavaba como un puñal por aquellos sitios por donde quería. Suyo fue el primer gol francés.

Los nuestros aguantaron la primera mitad aunque sin mucha profundidad y con demasiado respeto a unos franceses que solo eran capaces de parar a los nuestros con faltas (aunque el árbitro italiano debió perder las lentillas). Las arrancadas de Torres eran frenadas por la defensa gala y Raúl… bueno, feliz cumpleaños.

En fin que empezó la segunda mitad estuvo marcada por los cambios de Luis, que decidió prescindir del autor del gol español, aunque fuera de penalti. El mister quitó a Xavi Hernández y puso a Senna y sacó al bético Joaquín (al menos aquí si acertó) que fue el único que intentó algo con resultado positivo.

En una falta de las que nunca se pitan (gracias, señor colegiado) llegaría el gol de Vieira.

Y cuando los nuestros estaban volcados, llegó la magia de Zizou en un contragolpe, perfecto control, recorte y definición. Qué se le va hacer, ante tal ingenio no podemos luchar.

Tengo que decir que de las pocas cosas positivas que se pueden sacar de esta participación en el mundial, que la gente que nos gusta el fútbol podemos estar orgullosos ya que este deporte ha sido capaz de lograr algo hacía mucho tiempo que no se había conseguido aquí, que es unir a un país entero, con lo difícil que es eso ahora.

Nos volvemos a casa. Se acabó el sueño una vez más. Jugamos como nunca y perdemos como siempre. Fue bonito mientras duró.

LOS ESPAÑOLES TENEMOS QUE ESTAR ORGULLOSOS, NO NOS PODRÁN REPROCHAR NADA, HEMOS ESTADO CON LA SELECCIÓN COMO NUNCA.

Scroll al inicio