Banega se une a una larga lista de lesiones tontas

El último jugador en unirse al club de los lesionados fuera de los campos y en situaciones algo insólitas ha sido el valencianista Ever Banega. Ever Banega se dirigió a una gasolinera Valencia con su Audi R8 para repostar. Una vez que lleno el depósito, iba a la caja a pagar cuando vio que su coche se empezaba a mover. Se había olvidado de poner el freno de mano, y tuvo la “genial” idea de intentar frenarlo con su pierna. Las consecuencias fueron nefastas para él. Su pie se enganchó entre el bordillo de la acera y el coche, lo que hizo que se fracturara la tibia y el peroné.

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Ya ha sido operado con éxito por el doctor Gastaldi, quién afirma que deberá llevar insertado un clavo hasta que se jubile. Su período de recuperación estará en torno a los 6 meses, por lo que el Valencia intentará suplir su baja con alguna incorporación.
Banega no ha sido el único futbolista que ha sufrido este tipo de lesiones fuera de los terrenos de juego. Algunos predecesores son:

Nesta: se rompió el tendón de la muñeca debido a las muchas horas que se tiraba jugando a la PlayStation, sin duda el vicio le salió muy caro.

Santiago Cañizares: se cortó en el tendón de Aquiles en la concentración del Mundial 2002, dónde iba a ser el portero titular indiscutible, al intentar parar un bote de cristal de colonia que se le había caído.

Cristiano Ronaldo: Sir Alex Ferguson le cambió durante un partido y el luso fruto del rebote de la sustitución, dio una patada a una botella de agua llena. Tuvo que ponerse hielo en el pie.

Estos son un ejemplo de otros muchos futbolistas que han tenido mala suerte en su vida cotidiana.

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