Cientos de aficionados esperaron durante horas la llegada de la selección entrenada por Luis Felipe Scolari que aterrizó en el aeropuerto de Ginegra. Tras dos horas de vuelo la selección portuguesa encontró en Suiza una calurosa acogida entre banderas rojas y verdes que les acompañaron hasta su lugar de concentración en Neuchatel.
El presidente de la Federación Portuguesa de Fútbol, Gilberto Madaíl, describió como «inolvidable» la recepción de su selección en Suiza, después de que miles de aficionados saludasen este domingo a la plantilla con su llegada al país helvético.
Al llegar al hotel unos 10.000 aficionados esperaban para saludar a los jugadores. El presidente de la Federación Portuguesa de Fútbol, Gilberto Madaíl, describió como «inolvidable» este hecho y confesó que esperaban una gran acogida, pero no hasta ese punto. La selección lusa tiene su primera cita en el Grupo A el sábado contra Turquía.
Vía: uefa.com