Tras la jornada inaugural no ha habido grandes sorpresas, en el grupo A Rusia ha confirmado su superioridad ganando 4-1 a la República Checa y Polonia ha empatado a 1 en un triste encuentro contra Grecia donde nada fue como se esperaba y el miedo a ganar y a perder hizo del partido un sin sentido.
La Eurocopa se abría con una de la anfitrionas que se presentaba en casa ante Grecia, un equipo que era una incógnita. Polonia se adelantó en el primer tiempo lo que parecía darle cierta ventaja, más aún cuando Grecia se quedó con 10, así los aficionados polacos se veían dando un gran paso de cara a una hipotética clasificación para cuartos.
Pero las segundas partes nunca fueron buenas y eso debieron de pensar los polacos, pues se dejaron empatar e incluso pudieron perder tras un penalti con expulsión incluida de su portero. Pero el portero suplente se aferró a la heroica y evitó el gol que hubiese supuesto la debable. Al final mucho miedo a perder y un empate a 1 que de poco les sirve a ambos.
En el otro partido Rusia certificó su superioridad en lo que parece será un paseo en su grupo y se impuso 4-1 a la República Checa. A los 23 minutos ya ganaba 2-0 y tenía encarrilado un partido que sólo con 2-1 tuvo algo de esperanza para los checos, pero que Rusia se encargó de solventar con otros 2 goles en el último tercio del partido.
Al final el Grupo A se queda liderado por Rusia, selección que parece firme candidata a ser primera de grupo, y las incógnitas de quien le acompañará quedan a la espera de la segunda jornada en la que el enfrentamiento entre Grecia y la República Checa dirá mucho sobre el futuro del grupo.