Kimi Raikkonen ha conseguido una victoria de esas que ayudan a Ferrari, porque hacía tiempo que un piloto de la escudería roja no subía a lo más alto del podio y más de un año que el finlandés no ganaba, por lo que Bélgica y Spa puede ser la vuelta de los rojos a lo más alto.
La carrera de Bélgica comenzó con un accidente, un choque que dejó fuera al líder del mundial Jeson Button, que mantiene su distancia gracias a los errores de los demás, Jaime Alguersuari, que se esperaba que en este gran premio diera un cambio a su pilotaje, Lewis Hamilton y Romain Grosjean.
Una de las sorpresas fue el fuego que salió del monoplaza de Barrichello y que obligó al brasileño a perder posiciones hasta el séptimo lugar, dejando libre el podio para Fisichella, que ha completado un fin de semana de ensueño, y Vettel, que sigue vivo en el mundial, también se reinvidicaron gente como Kubica o Heidfield, en el octavo puesto y el último que sumó puntos fue Rosberg.
La actuación de Lucas Badoer fue otra vez decepcionante, quedándose en último lugar y una vez sin sumar puntos, por lo que la escudería italiana ha perdido puntos de oro a la hora de luchar por el título de escuderías.
