Novak Djokovic no dio ninguna oportunidad a Rafa Nadal en la final de Wimbledon, y es que el serbio se encuentra en un momento muy dulce y lo ha demostrado ganando sobre la mítica hierba del torneo británico. Además, ahora lidera la clasificación de la ATP, algo que es muy importante para él, puesto que desde el 2004 no había un hombre distinto a Roger Federer o Rafa Nadal ocupando ese puesto tan privilegiado.
El tenista serbio comenzó el partido muy serio, como Rafa Nadal, de hecho ninguno de los dos tenistas dejaron que su saque se escapara, pero al final, Novak Djokovic sacó un poco de calidad en el último juego y pasó la presión a Nadal, que no estuvo a la altura, y dejó escapar el primer set. Al igual que en el segundo, donde Djokovic se escapó desde el primer momento con un break y ganó con traquilidad el set.
En el tercero llegó la reacción del español, donde jugó con carácter y consiguió encontrar los huecos que no había encontrado hasta el momento, incluso se llegó a soñar con la remontada, cuando le hizo un contrabreak en el cuarto set, pero fue un espejismo, porque Djokovic no quería dejar escapar su primer Wimbledon.
El serbio celebró la victoria de forma curiosa, puesto que se comió un pedazo de hierba de la pista.
