El GP de China disputado el pasado domingo tuvo nombre y apellido alemán, Nico Rosberg. El alemán impuso su dictadura desde el primer momento de la carrera prácticamente, aunque con las entradas a boxes pudiera perder el liderato provisionalmente, lideró la carrera desde el principio hasta el final.
No corrió tanta suerte su compañero de equipo Michael Schumacher. Tras la primera parada en boxes, los mecánicos se olvidaban de apretarle las tuercas, literalmente se dejaban sin apretar una rueda, con lo cual el alemán tuvo que abandonar.
El equipo Red Bull reapareció a medias, tras una mala clasificación Vettel consiguió la cuarta plaza, seguido de su compañero de equipo Mark Webber en la quinta posición.
La nota negativa la puso Raikkonen, que tras una gran carrera tuvo que verse relegado hasta la decimocuarta posición después de haber luchado por el podio. También decepcionante fue la carrera de Fernando Alonso, que mantuvo al final de carrera la posición de salida en parrilla.
Los motores Mercedes funcionaron a las mil maravillas en China, ya que el equipo McLaren acompañó en el podio a Rosberg con Jenson Button segundo y Lewis Hamilton tercero.
Con esta victoria, Mercedes vuelve a ganar una carrera por méritos propios sin asociaciones extrañas, y Nico Rosberg estrena su palmarés en la Fórmula 1, 111 carreras después de haber debutado en la categoría.
Vivimos otra gran carrera este fin de semana, esperemos que esto siga tan bien como va.