La comunidad internacional enfrenta un llamado urgente a la acción por parte del Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua, durante una sesión ante la Asamblea General de la ONU. Los expertos advirtieron sobre el recrudecimiento de la represión bajo el Gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo, quien ha implementado una política sistemática para silenciar la disidencia, caracterizada por crímenes de lesa humanidad y violaciones graves de derechos humanos.
Jan-Michael Simon, presidente del Grupo, destacó cómo Nicaragua ha pasado de ser un promotor de la paz a figurar en la agenda de la ONU debido al desmantelamiento del Estado de derecho. La represión ha alcanzado niveles alarmantes, lo que requiere un escrutinio global más riguroso.
Las investigaciones del Grupo, que se basan en más de 1,900 entrevistas y 9,300 documentos, documentan un patrón de violaciones de derechos humanos «graves, sistemáticas y generalizadas» desde 2018. Los crímenes incluyen asesinato, encarcelamiento, tortura, violencia sexual y desapariciones forzadas. Este panorama se ha desarrollado en cuatro fases distintas: la represión violenta de protestas entre 2018 y 2020, la represión electoral en 2021, el cierre de organizaciones no gubernamentales en 2022 y la consolidación del poder absoluto en 2023.
Particularmente inquietantes son las desapariciones forzadas, que han aumentado drásticamente y han sumido a muchas familias en angustia e incertidumbre, como subrayó el experto Reed Brody. Asimismo, la privación de la nacionalidad afecta gravemente a al menos 452 nicaragüenses, dejándolos en un estado de apatridia que perjudica su acceso a servicios básicos y mantiene a familias separadas.
El Grupo también hizo hincapié en la represión transnacional, señalando que el gobierno ha creado una maquinaria de persecución que se extiende más allá de las fronteras, vigilando y hostigando a los críticos en el exilio. Esta táctica ha culminado en casos trágicos como el asesinato en junio de 2025 del mayor retirado Roberto Samcam en Costa Rica, un reconocido crítico del régimen.
Los expertos condenaron la decisión de Nicaragua de retirarse de varias agencias de la ONU y del Consejo de Derechos Humanos, argumentando que esto no es una afirmación de soberanía, sino una estrategia para evadir el escrutinio internacional y consolidar la impunidad.
Ante esta crisis, el Grupo de Expertos instó a la comunidad internacional a actuar de manera concreta. Las propuestas incluyen la protección de nicaragüenses en el exilio, rendición de cuentas a través de la Corte Internacional de Justicia, la imposición de sanciones a los responsables y el fortalecimiento del apoyo a la sociedad civil y los medios independientes en Nicaragua.
Con esta declaración, los expertos sentaron las bases para un movimiento hacia la acción, reiterando que el mundo no debe ser un mero espectador ante la violación de derechos humanos en Nicaragua.
Fuente: ONU últimas noticias



