La expedición española se encuentra desde el lunes en Copenhague (Dinamarca) expectantes por la resolución del COI para designar la sede de los Juegos Olímpicos 2016 y allí está Alberto Gallardón, con su corazonada. El Alcalde de Madrid confía casi ciegamente en las posibilidades de Madrid, algo que el resto de la población española no ve tan claro.
Podrían ser muchos los factores que aupasen a la capital española, entre ellas todas las alabanzas al informe realizado por la candidatura española. A favor apuntaron que la villa olímpica estaría muy cerca del centro de la ciudad y también felicitaron el transporte público. La unidad de los gobiernos nacional, regional y municipal en apoyar la candidatura económicamente también gustó al COI. La ley antidopaje era un impedimento para el COI, pero tras la resolución el Gobierno ha decidido modificarla para adaptarse a las peticiones del organismo internacional. Un punto más.
Pero también hay otros que nos impiden ser optimistas. El primero: Londres 2012. No hay una norma escrita que dicte la alternancia de continentes pero lo cierto es que desde 1948 siempre ha sido así, a excepción de Londres y Finlandia, ambos europeos y organizadores en 1948 y 1952. De ser así, la capital británica nos queda demasiado cerca.
Otro apunte que hay que tener en cuenta es la presencia de latinoamérica. Hasta ahora sólo se han realizado unos juegos en México, pero éste país se encuentra en territorio de América del norte y américa central, aunque aquí los reconozcamos también como latidos. Por tanto de elegirse Rio de Janeiro sería la primera vez que se celebran unos Juegos Olímpicos en América del Sur. ¿Por qué no podría ser la ciudad brasileña? Aquí jugamos contra el factor sentimental.
No debemos olvidarnos del ciclónico «efecto Obama«. La presencia del Presidente de Estados Unidos en la ceremonia del día 2 de Octubre para apoyar la candidatura de Chicago ha supuesto un auténtico revuelo, incluso algunos jueces han manifestado que su presencia es muy buena para la candidatura americana, llegando a multiplicar sus posibilidades por 25. ¿De verdad es para tanto? No hace nada fuera de lo común, el resto de representantes también irán a Cophenhague, incluso nuestro «Juancar», que además fue olímpico. El único representante institucional de todos los países que ha sido olímpico. Eso también debería contar ¿no?.
En fín, ya sólo quedan dos días para conocer el resultado y a falta de algo más fiable, debemos agarrarnos a la «corazonada» de Gallardon e ir ensayando el grito de «Hola Everyone» para la ceremonia de inauguración, por si acaso.