La Cobra Riccò quiere volver a correr, y es que parece que ha dejado atrás todos sus problemas de salud, que le hicieron ingresar durante unos días en un hospital por culpa de la alta fiebre que tenía a causa de problemas renales.
Estos problemas fueron las causas por las que su anterior equipo, el Vacansoleil-DCM decidiera expulsarle de sus filas, ya que la sospecha de un nuevo dopaje de Riccò eran muy altas y no se podían fiar de perder un patrocinador como ya pasara con el Saunier-Douval.
El ciclista italiano, que ha declarado delante del CONI, está seguro que no tiene nada que esconder, está limpio, o por lo menos no lo han pillado, y ahora busca como loco un equipo para volver a la competición, ya que no quiere perder otro año a la basura por culpa del dopaje. Aunque pocos equipos van a confiar en un ciclista que muestra muchas caras, sobre todo la buena cuando está corriendo, dando auténticos recitales, y la mala cuando realiza controles antidopaje y habla delante de los micrófonos.
