En un evento sin precedentes en el cruce entre el deporte, la tecnología y la industria, la Media Maratón de la Fábrica Inteligente de GWM 2025 transformó la planta de Xushui, en Baoding, en un emocionante circuito. La carrera atrajo a más de 10.000 corredores, quienes dessertaron a lo largo de talleres de estampado, soldadura y montaje, pasando junto a brazos robóticos y vehículos autónomos.
La competencia comenzó en la planta de GWM, donde la automatización y la inteligencia artificial se integran en cada fase del proceso de producción. Testigos del evento, como un empleado de la compañía, compartieron que un brazo robótico lo animó con un mensaje en su pantalla durante la carrera, subrayando la interacción entre humanos y máquinas.
GWM se ha dedicado al desarrollo de sistemas productivos inteligentes que permiten la manufactura interna de componentes esenciales como motores y transmisiones. Con la ayuda de más de 23.000 ingenieros, la compañía ha estado invirtiendo significativamente en innovación. Su Laboratorio de Túnel de Viento Ambiental realiza rigurosas simulaciones a nuevos vehículos, garantizando que puedan soportar condiciones climáticas extremas mediante tecnología avanzada.
Jack Wey, presidente de GWM, recalcó la importancia de la electrificación y la inteligencia artificial en la industria automotriz contemporánea. La empresa ha apostado por la integración vertical, lo que le permite destacar en un mercado competitivo. A lo largo de los años, GWM ha reconstruido su cadena de suministro, ofreciendo no sólo vehículos inteligentes, sino también una estrategia global de internacionalización basada en la creación de bases de producción en el extranjero.
La nueva planta en São Paulo, Brasil, que comenzará operaciones a mitad de año, generará 50.000 vehículos anuales de nueva energía. Este esfuerzo subraya la ambición global de GWM y su deseo de integrar sus capacidades industriales en otras partes del mundo, con el objetivo de democratizar el acceso a vehículos ecológicos y tecnológicos en mercados internacionales.
Mientras tanto, en Tailandia, la planta dedicada a la producción de vehículos de nueva energía está lista para operar. GWM continúa su expansión internacional, demostrando que su enfoque en la excelencia manufacturera es un símbolo del potencial de la industria automotriz china. Con una red de más de 1.400 concesionarios en el extranjero, la empresa ha vendido más de dos millones de vehículos fuera de su país y sigue estableciendo la presencia de marcas chinas en el ámbito global.