Desde hace años, la Copa Libertadores se disputa con un formato bastante semejante al de la Champions League, a excepción de que la competencia americana tiene lugar sólo en la primera parte del año, y que la europea se lleva a cabo durante toda la temporada oficial. Sin embargo, las noticias de último momento indican que pronto podría haber un punto más en común entre estos dos torneos, los más importantes del mundo a nivel internacional.
Es que de acuerdo a las recientes declaraciones del propio Presidente de la Conmebol, Eugenio Figueredo, “la final de la Copa Libertadores se disputaría en un solo partido en cancha neutral a partir de 2014, en vez de dos como hasta ahora”. Es decir, desde octavos de final se jugarían encuentros de ida y vuelta, favoreciendo siempre con la localidad en el segundo de ellos al mejor clasificado en la fase de grupos, pero no así en la final.
Esto tiene que ver con lo sucedido en las últimas ediciones de la Copa Libertadores -y también de la Copa Sudamericana– en las que como este año, hubo incidentes de hostigamiento hacia los visitantes. De hecho, la final de hace un par de semanas entre el Atlético Mineiro de Brasil y Olimpia de Paraguay fue lamentable desde el punto de vista humano para los fanáticos visitantes.
En este sentido, el mismo Figueredo manifestó que una de las problemáticas que se desprenden del actual sistema de disputa de la Libertadores, es que “las medidas de seguridad están a cargo de las autoridades públicas de cada país y no de la Conmebol”, y se evalúa que al mudar el encuentro definitorio a un campo neutral, sería el organismo futbolístico el que tome la posta al respecto.
Sin embargo, queda por definirse aún un asunto, que tiene que ver con que al realizarse el sorteo para el sitio donde se disputará la final previamente al campeonato, podrían existir chances de que un equipo “local” llegue a la instancia decisiva. Es evidente, entonces, que el problema sería mayor pues se dividiría la capacidad del estadio en dos, acarreando la movilización de una mayor cantidad de hinchas “visitantes”.
