España volverá a estar en la final de la Eurocopa de fútbol, al igual que hace cuatro años, tras derrotar en la tanda de penaltis a la selección de Portugal, un rival que le ha puesto las cosas muy difícil al equipo de Del Bosque, pero que al final ha sido justo vencedor del choque. Al igual que hace cuatro años ante Italia, Cesc ha anotado el penalti decisivo, eso sí con incertidumbre ya que entró golpeando primero en el palo.
Portugal ha sido un digno rival, pero con el paso del tiempo se fue reculando. El equipo empezó muy fuerte, con el control del balón y presionando mucho a los jugadores españoles. Hasta mitad del primer tiempo, la selección no empezó a tocar el balón como ella sabe, pero no fue capaz de generar ocasiones de peligro.
En la segunda mitad, el conjunto español tuvo un mayor control del encuentro, pero Portugal aprovechaba las contras para crear peligro. Cristiano Ronaldo tuvo tres oportunidades con lanzamientos de falta, pero ninguno fue entre los tres palos.
En la segunda parte Del Bosque dio entrada a Cesc, Pedro y Jesús Navas para intentar explotar las bandas, y el equipo ganó con ello. De las botas de Pedro y Navas llegaron las mejores opciones de la selección, pero la falta de un nueve de referencia hacía que muchas jugadas no fueran rematadas.
Con el empate a cero se llegó al final del encuentro. En la prórroga solo hubo un equipo. Portugal se encerró completamente atrás para intentar pillarnos a la contra, pero Ramos y Piqué han demostrado que se compenetran muy bien, y desbarataban cualquier ocasión de peligro. En el minuto 104 Iniesta tuvo la oportunidad de batir al Portero portugués pero su remate fue detenido.
Al final los penaltis iban a decidir el vencedor, y parece que últimamente la suerte está de nuestro lado y eso que la cosa empezó mal con el fallo de Alonso, pero Casillas lo igualó parando el lanzamiento de Moutinho. Después llegaron los goles de Iniesta, Piqué y Ramos, este a lo Panenka, mientras que Portugal anotaba por medio de Pepe y Nani. Bruto Alves lanzó el cuarto para los portugueses, pero este fue repelido por la madera. Cesc anotó el último que nos dio el pase para la gran final de la Eurocopa de fútbol.
