Desde el principio el Oporto apretó hacia el campo de los alemanes que se encerraron atrás, aguantando los envites hasta el minuto 85 en que el muro se rompió y un disparo del argentino Lisandro López entró en la portería de Neuer. La eliminatoria estaba empatada. En la prórroga, ambos conjuntos se respetaron mucho para no caer en errores y tras 120 minutos de juego, la suerte de unos y otros quedó pendiente de los penaltis. El la tanda de penas máximas el portero del Shalke 04 tuvo más templanza para ofrecer el pase a cuartos de final a sus compañeros y hacer historia en esta competición europea.