El Real Madrid disputa esta noche su partido de ida de los cuartos de final frente al APOEL de Nicosia. Lo hace frente a la cenicienta de la competición pero que si ha llegado a esta ronda lo ha hecho por méritos propios y no le han regalado nada.
El equipo merengue es el claro favorito y su entrenador no lo esconde, tal y como comentó ayer en la rueda de prensa. En ocasiones este tipo de partidos frente a rivales supuestamente pequeños se puede llegar a complicar, por lo que los blancos deberán tener mucho cuidado para evitar un resultado que le ponga las cosas difíciles en la vuelta en el partido que se disputará en el Santiago Bernabeu.
Mourinho parece ser que ha dejado de lado la opción del trivote, y en el partido de esta noche saldrá al ataque con todos sus efectivos, es decir, Cristiano Ronaldo, Benzemá, Higuaín, Kaká y Ozil. De ser así, será un equipo totalmente volcado en la meta del rival, buscando un resultado que le de tranquilidad para el partido de vuelta.
En el medio del campo no podrá contra con Xabi Alonso, sancionado tras ver la amarilla en el partido frente al CSKA y su puesto será ocupado por Granero, que no había jugado desde la falta que cometió frente al Málaga y de la que salió el gol del empate. Tampoco ha viajado Lass, que sufre pequeñas molestias, pero que las malas lenguas dicen que se ha autodescartado.
En la defensa regresa Pepe que se perdió el último partido de liga frente a la Real Sociedad por sanción, y formará pareja con Sergio Ramos. En los laterales estarán Marcelo y Arbeloa.
Por parte de los chipriotas, no estará su mejor jugador, Manduca, sancionado, pero espera que su público les lleve en volandas para lograr un buen resultado.
El encuentro será dirigido por el alemán Felix Brich.
