El Barcelona de Pep Guardiola ha caído en las semifinales de la champions, pero como lo hacen los campeones, porque el conjunto azulgrana fue el mejor del partido, el único que quiso el balón, antes y después de la expulsión de Mota, pero en esta ocasión no tuvo la chispa de otras ocasiones y no acertó en los momentos claves, quizás ese fue el gran problema, porque Messi tuvo dos, Bojan Krkic tuvo otra clarísima y Pedro también estuvo cerca, pero en esta ocasión la muralla interista se llevó el pase a la final de forma injusta.
El Inter de Milan se tiró atrás desde el primer minuto de parido, no quiso el balón y solo esperó que los jugadores del Barcelona se acercaran al área, además la expulsión de Mota, un poco rigurosa viendo algunas entradas que se dieron después, ayudó al equipo de Mourinho, porque tuvo la excusa perfecta para tirar atrás al equipo y no salir para nada.
Con Milito de falso pivote y Samuel Eto’o de lateral, el Inter de Milan esperó que el tiempo pasara, por cierto el árbitro dejó que los jugadores perdieran mucho tiempo con el balón, tan solo el gol de Piqué a falta de seis minutos para el final cambió el rumbo del encuentro, ya que se vieron diez minutos de emoción marcados por el gol anulado a Bojan Krkic por unas «manos» de Keyta.
Ahora el Barcelona le queda ganar la liga, y no lo va a tener nada fácil con su salida este sábado a Villareal.
