Para los altos, para los bajos, para los gordos, para los flacos, para los rubios, para los morenos y para todos aquellos que pensaban que el Barça ya estaba tocado y hundido. Para todos ellos van los cinco goles marcados anoche en el Camp Nou, porque no hay nada más lejos de la realidad señores. Este equipo solo está empezando a rodar y anoche lo demostraron en el terreno de juego de la mejor forma: en casa, en Champions League y con una manita.
El guión estaba más que aprendido desde antes del partido y se siguió casi al pie de la letra, aunque bien es cierto que hubo momentos de indeterminación y descontrol que desembocaron en los dos goles del Olympique de Lyon. En el minuto uno los culés comenzaron a presionar, como era de esperar para marcar al menos un gol que les proporcionase tranquilidad y les cubriese las espaldas en caso de que al Lyon le diese por marcar pero hicieron más que eso.
Tras varios intentos, Henry abrió el marcador tras un pase magistral de Rafa Marquéz que le permitió avanzar hacia la portería y batir a Lloris. El segundo llegaría también de las botas del francés tan solo dos minutos después a pase de Xavi y en discutido fuera de juego. En su celebración se llevaba la mano a la oreja como hablando por teléfono y diciendo: «llamando a la tierra, sigo aquí, Titi nunca se ha ido».
Marcados los goles de la tranquilidad el equipo pareció venirse arriba para dar un recital futbolístico a su afición, y entonces llegó Messi con un gol con sello personal, regateando a los contrarios, internándose en el área y haciendo el 3-0. En los siguientes minutos Eto’o avisó de sus ansias de golear (no lo hacía desde el partido ante el Betis en Liga) y en el 42′ Henry le cedió el balón para que el camerunés marcara a placer y redondease una primera parte inmejorable. Lástima que fuese empañada por un gol del Lyon al filo del descanso de Makoun. Fue tras un saque de esquina (no podía ser de otra forma porque Benzema se encontraba solo en territorio enemigo) y en el minuto 44 el jugador de Camerún daba esperanzas de remontada visitante.
La misma sensación tuvieron tras comenzar la segunda parte porque nada más empezar Juninho hizo el 4-2 tras un error defensivo del Barça. Fueron los momentos grises del líder de la Liga española, pero pronto se disolvieron. Retomaron el control del esférico y se dedicaron a desquiciar al equipo de Claude Puel, que recurrió a las patadas para frenar a los azulgranas. Tanto fue así que se sacaron hasta cuatro amarillas en el 2º tiempo y una expulsión del brasileño Juninho.
Para completar la noche Keita, que entró por Henry, dejó claro quién mando durante el encuentro y en el minuto 4′ del descuento hizo el definitivo 5-2.
Pases milimétricos, goles con potencia, esquivando rivales y en el último minuto. Todo un recital para todos los gustos y para sellar el pase a cuartos de final. El próximo rival se conocerá tras el sorteo el día 20 de marzo en Niza y en el bombo esperarán cuatro ingleses, un alemán, un español y un portugués.
Imagen: Fcbarcelona.com