Todavía corean en la cabeza de los españoles las palabras que dijo Juan Martín Del Potro después de ganar el punto decisivo ante Rusia en las semifinales de la Copa Davis, sí, me refiero a lo de los calzoncillos de Nadal y el orto, pero parece que a algunos argentinos se les ha olvidado, y todo porque cayeron en la final ante España y perdieron la mejor oportunidad de conseguir la primera ensaladera de su historia.
El villano de la eliminatoria ha sido Juan Martín Del Potro, quitándole un poco la responsabilidad a Calleri y Acassusso que quizás no tienen más tenis dentro de él, ya que las críticas van sobre el estado de forma que tuvo el joven argentino durante la final, y es que a pesar de jugar solo un partido y lesionarse ya tiene más de un crítico que afirma que todo la culpa es suya por ir a Shanghai a disputar un torneo que no tenía posibilidades, y que tenía que haber estado con sus compañeros preparando la final.
No sé si estas críticas van a afectar a Juan Martín Del Potro, pero está claro que no le tienen que hacer muchas gracias, porque él podía disputar partidos de tres sets, pero de cinco lo tenía muy complicado, entre otras cosas porque el efecto calmante de las pastillas solo duraban dos horas, por eso se infiltró, aunque el problema no lo tuvo en el pie, sino en el muslo, y es que se le rompió las fibras, cosa que le podía haber pasado en cualquier momento después de una temporada tan larga para él.
Así que creo que son injustas, además es el primer año en la élite de Juan Martín Del Potro, y tiene que aprovechar las posibilidades de ganar más dinero, y seguro que en Shanghai se ha llevado un buen pellizco.
