En 2023, se reveló que el 21,7% de las empresas de la Unión Europea (UE) participó en el comercio internacional de bienes como comerciantes bidireccionales. En contraste, un 70,0% de las entidades actuaron únicamente como importadores, mientras que un 8,3% se limitó a ser exportadores. Esta distribución pone de manifiesto la naturaleza del comercio en la región, donde los actores internacionales se inclinan predominantemente por operaciones que abarcan tanto la importación como la exportación.
En términos de valor, los comerciantes bidireccionales manejaron una abrumadora mayoría del 95,3% de todos los bienes comercializados en la UE. Las empresas que solo se dedicaron a la importación representaron el 3,9%, y aquellas que solo exportaron, una fracción mínima del 0,8%. Este panorama evidencia la importancia de la interacción en ambos lados del comercio internacional, donde la diversificación en las operaciones parece ser la norma.
Analizando por sectores, la mayor proporción de comerciantes bidireccionales se dio en la manufactura, donde alcanzaron un 45,6%. Otros sectores como la minería y la explotación de canteras, y el suministro de agua demostraron también ser significativos, con un 39,2% y un 29,9% respectivamente. En el otro extremo, actividades como la inmobiliaria (7,3%), la construcción (8,6%) y las finanzas y seguros (10,4%) mostraron las tasas más bajas de empresas involucradas en el comercio bidireccional.
Por otro lado, el sector de la construcción reportó la mayor concentración de empresas que solo importan, alcanzando un impresionante 86,8%. La actividad inmobiliaria y el sector financiero también presentaron cifras elevadas, con un 86,2% y 82,3% respectivamente. Contrariamente, las industrias como la minería y la manufactura, con 41,0% y 42,4%, mostraron menores proporciones de importadores exclusivos.
Finalmente, el análisis de las empresas que únicamente exportan revela que los sectores de agricultura, silvicultura y pesca (20,2%), junto con la minería y el transporte y almacenamiento (19,8% y 15,3%, respectivamente) son los más activos en esta categoría. En contraste, los sectores con menores actividades de exportación solo incluyeron a la construcción (4,6%), la actividad inmobiliaria (6,5%) y el suministro de electricidad, gas, vapor y aire acondicionado (6,6%).
Este panorama del comercio en la UE destaca la complejidad y diversidad de las actividades económicas dentro de la región, subrayando la necesidad de estrategias adaptativas que favorezcan un equilibrio entre importaciones y exportaciones para las empresas en un contexto global cada vez más dinámico.
