La creciente importancia de los criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) se ha hecho evidente en el panorama empresarial español, especialmente con el incremento de normativas en 2024 que obligan a las empresas a informar sobre sus resultados en estas áreas. Este año, se prevé un cambio significativo con la implementación del Reglamento de la Unión Europea sobre Deforestación (EUDR), que tiene como objetivo combatir la deforestación y promover prácticas sostenibles dentro del mercado europeo.
El equipo de osapiens, especializado en el desarrollo de soluciones de Software as a Service (SaaS), ha identificado cinco tendencias clave que las empresas españolas deben considerar para adaptarse a esta nueva realidad ESG. En primer lugar, se destaca la expansión y ampliación de las normativas, las cuales se están extendiendo a otras jurisdicciones y plantean nuevos retos de cumplimiento para las compañías que operan a nivel internacional. El EUDR, que comenzará a regir a finales de diciembre de 2025, es un claro ejemplo de esta tendencia.
Además, la integración de los datos ESG en la estrategia empresarial se vuelve crucial. Las organizaciones deberán ver la sostenibilidad no solo como un requisito normativo, sino como una ventaja competitiva que influye en las decisiones de compra de los consumidores y en la inversión. Implementar prácticas sostenibles, como cadenas de suministro responsables y programas de compromiso social, se traduce en un fortalecimiento de la imagen de marca y en una diferenciación en un mercado cada vez más competitivo.
Asimismo, la adopción de soluciones tecnológicas ESG se acelerará, siendo fundamentales para cumplir con normativas cada vez más complejas. Las herramientas digitales permitirán a las empresas recopilar, analizar y reportar sus datos ESG de manera eficiente, garantizando la precisión y el cumplimiento. La automatización facilitará el flujo de trabajo y reducirá la carga manual, proporcionando además información valiosa que impulse el rendimiento sostenible.
Un aspecto que también cobrará relevancia es el uso de la Inteligencia Artificial en las plataformas SaaS. Este recurso se convertirá en una necesidad, mejorando la personalización de la experiencia del usuario y aumentando la eficiencia operativa.
Por último, se espera un mayor demanda de transparencia. Según un estudio de Simon-Kucher, el 64% de los consumidores considera la sostenibilidad un factor clave en sus decisiones de compra, y cerca del 70% investiga las afirmaciones de sostenibilidad de las marcas. Esta presión por un mayor nivel de transparencia obligará a las empresas a adoptar prácticas más abiertas y responsables.
Alberto Zamora, CEO de osapiens, subraya que 2025 será un punto de inflexión para las empresas españolas en el ámbito de ESG. A medida que crecen las complejidades normativas, será esencial contar con un socio tecnológico que facilite un cumplimiento efectivo y eficiente de las regulaciones.
