El graffiti es una cultura que se ha extendido hasta límites insospechados en los últimos años en todo el mundo. No obstante, también es cierto que en buena parte de los países, incluso en los más desarrolladores del planeta, este tipo de arte ha sido perseguido casi de forma sistemática. Por eso, una noticia como la que proviene de Australia en las últimas horas no hace más que generar ilusión al respecto para todos sus amantes.
En concreto, el caso es que la ciudad de Canberra, una de las más importantes de todo el territorio de Australia, ha decidido ya de forma oficial, legalizar los graffitis en algunas áreas restringidas a nivel local, dando un ejemplo de la convivencia social y pacífica no tiene nada que ver con las personas que buscan expresar su arte callejero de esta manera.
La noticia, que fue confirmada por el propio Gerente de Programas de Planificación de la ciudad, Julie Garbode, transforma a Canberra en una de las primeras localidades en todo el mundo dentro de las cuales es posible realizar graffitis en “zonas liberadas”. Sin dudas, una instancia superadora a las actividades de graffiti que limitan no sólo en espacio, sino también en tiempo y forma de expresarse.
Según las autoridades de Canberra, todos los interesados en realizar graffiti en la ciudad tienen hasta 26 sitios especialmente desarrollados con este fin, todos los cuales serán administrados por el Gobierno. De esta forma, pretenden que la iniciativa funcione también como elemento disuasorio para el graffiti ilegal en una propiedad privada o de zonas gubernamentales, algo que se hizo común en la ciudad en los últimos tiempos.
En la mayoría de los casos, los sitios especialmente preparados para que se realizan graffitis sobre ellos tienen que ver con sanitarios, drenajes y muros que habían caído en el desuso, o que bien recién han sido implantados. Sin dudas, una muestra de que hay lugar para el graffiti en las sociedades modernas que tantas veces han denostado esta increíble cultura.