Treinta años después de la devastadora riada que afectó a Yebra y Almoguera, la Casa de la Cultura de Almoguera ha inaugurado una exposición permanente y un documental que evocan esos días difíciles de destrucción y solidaridad. Este proyecto, titulado «30 años de la riada», busca honrar a las víctimas y promover la prevención para que una tragedia similar no se repita.
La inauguración de la muestra y el documental tuvo lugar ayer, con gran afluencia de público. La exposición, que incluye más de doscientas fotografías tomadas por el fotoperiodista Javier Castañón dos días después de la tragedia del 9 de agosto de 1995, ofrece una mirada profunda sobre lo ocurrido. También se presentan valiosos materiales del Archivo de la Diputación de Guadalajara y del Centro de la Fotografía y la Imagen Histórica (CEFIHGU). Completan la exposición dos documentales que recogen testimonios de vecinos, evocando con emoción aquellos momentos oscuros y también momentos de esperanza.
La Casa de la Cultura ha experimentado una notable acogida, con alrededor de 1.500 asistentes a los cuatro pases del documental durante el fin de semana. El alcalde de Almoguera, Antonio Barona, destacó el impacto en las generaciones más jóvenes, quienes, sorprendidos por las imágenes del pasado, logran comprender las historias narradas por sus mayores. Según Barona, los relatos que se ofrecen permiten experimentar una amplia gama de emociones, desde la tristeza hasta el humor, y resaltó la enseñanza fundamental de la experiencia: aprender del pasado para forjar un mejor futuro.
Juan Pedro Sánchez, alcalde de Yebra, recordó que su municipio padeció la pérdida de diez vidas y cómo esa tragedia marcó a la comunidad. En su intervención, destacó que la exposición y el documental evidencian no solo el dolor que se vivió, sino también la esperanza y la solidaridad que surgieron en aquellos difíciles momentos. Según Sánchez, recordar lo ocurrido es esencial no solo para honrar a las víctimas, sino también para prevenir que acontecimientos como este se repitan en el futuro.
El acto, que convocó a autoridades y vecinos, se celebró en un ambiente de unidad. Pablo Bellido, presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, recordó la relevancia de la colaboración ciudadana e institucional durante la catástrofe de 1995. Subrayó que, en un contexto donde la comunicación era limitada, los medios de comunicación jugaron un papel crucial para informar sobre la situación.
La exposición permanecerá de forma definitiva en la Casa de la Cultura de Almoguera, con intención de ser itinerante y viajar a otras localidades que lo soliciten. En Yebra, la presentación de ambos proyectos, aunque con algunos materiales compartidos, se llevará a cabo el 29 de agosto en un acto cultural y de homenaje. Esta iniciativa no solo tiene un valor histórico, sino que también busca fomentar una mayor conciencia sobre la importancia de la prevención y la cooperación frente a desastres naturales.