Uruguay tiene su pase a octavos prácticamente encaminado, y es que después de golear a la selección anfitriona, no es para tener menos motivos.
La selección centroamericana goleó por 3 a 0 a una pobre Sudáfrica que poco pudo hacer para soportar el peso de un gran goleador como es Diego Forlán, que encajó a los sudafricanos dos grandes golazos, que alisaron el camino para que Uruguay pusiese tierra de por medio y dejase a Sudáfrica sin opciones.
A estas alturas Sudáfrica ya está casi fuera del Mundial, y si no ocurre prácticamente un milagro no irá más allá de octavos de final. Por su parte, Uruguay tiene más de pie y medio dentro de la siguiente fase eliminatoria. Sobretodo, después de que el propio Forlán opinase que este resultado es una gran inyección de moral para los uruguayos.