Más de 15 millones de niños en Sudán requieren asistencia humanitaria, una cifra que se ha duplicado en solo dos años desde el inicio de la guerra en 2023. Esta alarmante cifra fue reportada por el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), que ha advertido sobre la creciente violencia, el hambre y las enfermedades en el país. Además, las restricciones de acceso y financiamiento están complicando aún más la situación, llevando a una crisis que podría convertirse en una catástrofe aún mayor.
Catherine Russell, directora ejecutiva de UNICEF, señaló que «dos años de violencia y desplazamiento han destrozado las vidas de millones de niños en Sudán.» Su advertencia es clara: las necesidades humanitarias superan con creces el financiamiento disponible. Ante la inminente llegada de la temporada de lluvias, Russell enfatiza que aquellos niños que ya padecen desnutrición y enfermedades serán aún más difíciles de alcanzar.
UNICEF ha solicitado mil millones de dólares para poder mantener su respuesta humanitaria en el país; sin embargo, hasta la fecha, solo ha recibido 12 millones. La crisis en Sudán es considerada la mayor de su tipo en el mundo, con más de 30 millones de personas necesitando ayuda, de las cuales la mitad son niños. Alrededor de 15 millones de personas han sido desplazadas, y más de la mitad de estos son menores, con un tercio de ellos siendo niños menores de cinco años.
La situación es aún más grave con el aumento de las violaciones graves de derechos contra los niños, que han aumentado un 1000% en los últimos dos años. Estos hechos incluyen asesinatos, mutilaciones, secuestros y ataques a escuelas y hospitales, afectando principalmente a regiones como Darfur, Jartum, Aljazeera y Kordofán del Sur.
La hambruna es otra de las urgencias en Sudán, afectando a al menos cinco zonas, mientras que otras cinco están al borde de sufrirla, y 17 más se encuentran en riesgo. Se estima que entre mayo y octubre, hasta 462,000 niños podrían experimentar desnutrición aguda grave.
Además, los brotes de enfermedades están aumentando, con 49,000 casos de cólera y más de 11,000 de dengue registrados solo en 2024. El acceso humanitario se ha visto obstaculizado por el conflicto y las restricciones impuestas por diferentes autoridades y grupos armados. Más del 60% de las entregas de ayuda por parte de UNICEF fueron retrasadas en 2024.
Catherine Russell subrayó la falta de atención internacional hacia esta crisis, afirmando que «Sudán es la mayor crisis humanitaria hoy en día, pero el mundo no está prestando atención.» La responsable de UNICEF hizo un llamado urgente a salvar a los niños en Sudán, destacando la necesidad imperante de financiamiento y acceso sostenido para abordar esta crisis. «No podemos abandonarlos. Tenemos los medios y el compromiso, pero necesitamos acceso y financiamiento sostenido. Lo más importante es que este conflicto termine ya», concluyó Russell.
Fuente: ONU últimas noticias