Más de 3,3 millones de niños en Haití necesitan asistencia humanitaria en este momento crítico. El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, ha alertado sobre la alarmante situación causada por la inseguridad sin precedentes que afecta al país, desplazando a más de 680.000 menores de edad, muchos de los cuales han tenido que huir de sus hogares en múltiples ocasiones.
La situación ha empeorado considerablemente, dado que el año pasado, tres millones de niños requerían ayuda, lo que refleja un deterioro en las condiciones de vida de la infancia. Según UNICEF, esta crisis ha dejado a los niños en una situación límite, enfrentándose a la violencia, el abandono, la explotación y el hambre, mientras las escuelas permanecen cerradas y los hospitales están desbordados.
El contexto actual de Haití no es el resultado de un solo evento, sino de décadas de inestabilidad crónica. La fragilidad política, la desigualdad económica, los desastres naturales y el debilitamiento de las instituciones han contribuido a crear una de las emergencias humanitarias más complejas del mundo. UNICEF enfatiza que, sin acciones decisivas, el futuro de toda una generación está en juego.
En lo que va del año, el número de niños desplazados ha casi duplicado, y en total, más de 1,3 millones de personas han sido forzadas a abandonar sus hogares. La magnitud de estos desplazamientos es histórica, con 246 campamentos establecidos en el país, donde muchos niños han tenido que huir repetidamente debido a la violencia generalizada. La directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, ha destacado que cada vez que los niños son obligados a escapar, no solo pierden sus hogares, sino también oportunidades educativas y su infancia.
El informe también menciona que el 33% de los campamentos carecen de infraestructuras adecuadas, lo que expone a los menores y a mujeres a un mayor riesgo de violencia y abuso. Las escuelas, a menudo utilizadas como refugios, están afectando la educación de casi medio millón de estudiantes. De los 3,3 millones de niños que requieren atención humanitaria, más de un millón enfrenta inseguridad alimentaria crítica, con casi 289,000 menores de cinco años en riesgo de sufrir malnutrición aguda.
La violencia en Haití ha permitido que grupos armados controlen más del 85% de Puerto Príncipe y las rutas principales, privando a las familias de acceso a alimentos y atención médica. A pesar de este sombrío panorama, UNICEF y sus aliados han logrado tratar a más de 86,000 niños con emaciación y proporcionar asistencia sanitaria y agua potable a miles de personas.
Con la intención de revertir esta espiral descendente, UNICEF hace un llamado urgente a la comunidad internacional para que priorice la infancia en Haití. El organismo especializado propone restablecer el acceso humanitario, aumentar el financiamiento para asistencia y proteger los servicios básicos, mientras busca apoyo internacional para garantizar un futuro más prometedor para los niños en la nación caribeña.
Fuente: ONU últimas noticias
