Millena Xavier, una joven de 18 años que ha demostrado ser una prodigio en las ciencias, ha cosechado 38 medallas en Olimpiadas Científicas y se ha convertido en la directora de una ONG que ha ayudado a más de 90.000 jóvenes a prepararse para estas competiciones. En un mundo cada vez más influenciado por la automatización y el uso generalizado de la inteligencia artificial (IA), Millena aboga por la preservación de la creatividad humana y la capacidad de resolución de problemas.
En el marco del Día Internacional de la Educación, la UNESCO invita a reflexionar sobre el uso responsable de las tecnologías. António Guterres, Secretario General de la ONU, destacó que a medida que la IA se potencia, es esencial mantener la intención humana en el uso de estas herramientas, ya que existe el riesgo de que la dependencia tecnológica pueda desajustar nuestras decisiones.
Millena sostiene que es perjudicial que los estudiantes se conviertan en dependientes de la inteligencia artificial. «Utilizar la IA para cada tarea es una señal de alarma de que la situación no es muy buena», expresó, enfatizando que los trabajos escolares no deben ser tan sencillos como utilizar un programa para obtener respuestas.
Recientemente, el gobierno brasileño anunció la prohibición del uso de teléfonos móviles en las aulas, una medida que Millena apoya. “Esta prohibición es importante para imponer límites que a veces los alumnos no se autoimponen”, argumentó, añadiendo que, aunque los móviles pueden ser útiles, su uso excesivo en el aula puede ser más perjudicial que beneficioso.
Casi el 40% de los países ya cuentan con políticas que restringen el uso de teléfonos móviles en las escuelas, un aumento notable desde el 24% registrado en julio de 2023, según datos de la UNESCO. Para Millena, la creatividad es el verdadero valor que debe preservarse en la educación, y la IA debe utilizarse como una herramienta de apoyo, no como un sustituto en la generación de ideas.
Las habilidades que los estudiantes deben desarrollar hoy, según ella, no son solo el manejo de la tecnología, sino también el entendimiento de cuándo y cuánto usarla. «Los profesores deben plantear tareas que requieran creatividad y capacidad de resolución de problemas, en lugar de trabajos que se puedan realizar fácilmente mediante inteligencia artificial», añadió.
Además de desempeñar un papel importante en el ámbito educativo, Millena ha innovado con herramientas que combinan tecnología y educación. Ha desarrollado una herramienta de IA para ofrecer clases de matemáticas e historia y creó, en respuesta a la falta de diagnóstico del autismo, un algoritmo que ayuda a identificar signos de esta condición en diferentes grupos de edad. Su amiga fue la primera en beneficiarse de esta innovación, que ha obtenido reconocimiento internacional.
A medida que Millena continúa su camino, su compromiso con la educación y su visión sobre el equilibrio entre la tecnología y la creatividad humana resuenan con fuerza, invitando a un debate crucial sobre el futuro de la enseñanza en un mundo cada vez más automatizado.
Fuente: ONU últimas noticias
