Ayer el escenario no podía ser mejor porque todo estaba lleno «hasta la bandera», no cabía nadie en la Casa de Campo y todo porque jugaba la estrella de España y el actual número uno Rafa Nadal, y es que este manacorí ha hecho que el tenis español este de moda y todas las personalidades quieran ir a verlo, ya que ayer estaba gente como Raúl, jugador del Madrid, Almodovar y el mismísimo Aznar.
El partido de ayer era uno de esos que se llaman de trampa, porque Nadal se enfrentaba al letón Gulbis, un tenista joven que poco a poco está subiendo escalones, pero que para los que no están muy al día de este deporte y solo miran la clasificación de la ATP era un rival muy fácil para el número uno, pero después se demostró que no era así, además mucho sabían que en Wimbledon ya le había ganado un set al español.
El primer set fue agónico, porque el letón no paraba de hacer buenos saques y Nadal solo podía ir andando de un lado a otro de la pista, hasta el punto que parecía desesperado, porque las bolas de break no llegaban y el cansancio comenzaba a hacer mella, y eso que se llevaba poco tiempo de partido, hasta que llegó el undécimo juego, ahí el español no perdonó y consiguió el primer break del encuentro, gracias a una doble falta de Gulbis, certificando con su saque la victoria por 7-5.
En ese momento casi todo el mundo daba por hecho la victoria, pero Gulbis no tenía ganas de irse de esa manera de Madrid, así que volvió a apretar y se «comió» a Nadal en el segundo set consiguiendo un 6-3, además en ese momento aparecieron los problemas físicos del español que tuvo que pedir asistencia médica, pero como este hombre hace su historia a base de épica, se levanto y consiguió ganar el tercer set.
Ahora el rival de Rafa Nadal será el frances Gasquet, que todavía no ha conseguido ganar al español en los cinco enfrentamientos que han tenido.
