Empecemos por los errores del partido de ayer. Roberto Carlos, baja. Su sustituto fue Sergio Ramos; la única posición en la que el de Camas hace aguas; pues allí lo mando Capello, y eso que tenia 2 laterales zurdos naturales de recambio (Raúl Bravo y Marcelo). Raúl, solo por que salga, se le pone en demarcaciones que no son la suya, en la banda izquierda o derecha y se pierde. Emerson, se quedaba como el único destructor de juego, y defraudó, al igual de Cannavaro que parece otro.
Ahora vamos a por las dos grandes decisiones técnicas de la jornada. Titularidad de Gago. Capello ha demostrado saber poco del jugador argentino. En rueda de prensa, dijo que le habia visto con la selección y el jugador aún no ha debutado con la albiceleste. Pese a ser un jugador de carácter, Fabio Capello debía haber protegido más al recién llegado, sobretodo tras la presión mediática que había recibido a lo largo de la semana. Segunda decisión. Higuaín-Robinho-Cassano. Capello no ha parado de hacer desplantes a Antonio Cassano, para demostrar que no contaba con él. Pues ayer si fue convocado y dejó en la grada a Robinho y a Higuaín. Lo del brasileño parece un toque de atención, pero la no convocatoria de Higuaín y si la de Cassano, no la entiendo, pero no la entiendo por lo que venía realizando el tecnico italiano en las sesiones de entrenamiento madridistas.
En definitiva, muchas ideas contradictorias que hacen que la plantilla salga a los partidos en estado de «Shock». Se pierden balones atrás y el futbol de aatque no existe. Del ataque del Madrid solo se habla de Ronaldo, que se lo quieren cargar. Aunque no desmerecer al Deportivo que cuajó un gran partido, Arizmendi, Riki, Capdevila, Cristian, Lopo, Duscher.. estuvieron a la altura y desarbolaron al equipo madridista desde el primer minuto.
La crisis deportiva es ya casi una realidad, aunque la crisis institucional viene de más atras. Ramón Calderón no ha solucionado aún nada. Se ha gastado 100 millones de euros en fichajes, y para más inri, aun esta el voto por correo, que le deja en entredicho.
