La música tiene el poder de relajarnos. De ahí que no sea raro que las personas apuesten por ella en cualquier momento del día, ya sea para llevar a cabo las tareas domésticas, a la hora de practicar deporte o en el camino al trabajo. Ahora bien, ¿os habéis parado a pensar el impacto que tiene en vuestra vida? Muchos expertos afirman que la música es uno de los elementos que más placer dan proporcionan a la vida ya que libera dopamina, una neurohormona que se le relaciona con el placer.Muchos científicos han planteado a través de múltiples estudios, los efectos y beneficios de la música en las personas, los animales y en las plantas.
Efectos tiene la música en el cerebro
Entre los principales efectos que tiene la música en nuestro cerebro, podemos destacar:
- Regula la velocidad de las ondas cerebrales y mejora los procesos del aprendizaje, el sueño y la atención.
- Fortalece la memoria, recrea recuerdos, ayuda a la creatividad, flexibilidad emocional y cognitiva.
- Ayuda en la autonomía e incrementa habilidades lingüísticas, matemáticas, sociables y motoras.
- La música activa los dos hemisferios del cerebro.
Adicionalmente, la música hace que nuestra salud mejore y fortalezca el sistema inmunológico, disminuya los niveles de ansiedad e incremente el bienestar, además mantenga e intente recuperar el funcionamiento cognitivo, físico, emocional y social, y aumente los niveles de proteínas asociadas con la producción de plaquetas y estimulación de linfocitos.
Beneficios de la música en las personas
Asimismo, se ha podido ver otros beneficios de la música en el ser humano y en la práctica de deportes:
- En los pacientes con Parkinson mejora la motrocidad e incrementa el razonamiento espacial en pacientes autistas.
- Escuchar música ayuda a que los niños con capacidades especiales, pacientes con dificultades para hablar o con trastornos neurológicos como demencia y Alzheimer puedan mejorar sus habilidades.
- En el deporte, se ha demostrado que los ciclistas que escuchan música requieren 7% menos de oxígeno que los ciclistas que practican en silencio.
- Escuchar música afecta los latidos del corazón, el pulso y la presión arterial. Además, cambia la velocidad de las ondas cerebrales.
- Un estudio, entre niños de 3 a más años, con educación musical, demostró lo siguiente: Presentaron un incremento en su motricidad fina, así como en la discriminación auditiva (indispensable para el aprendizaje de otros idiomas).
- A los niños ayuda a tener un mejor vocabulario y mejores habilidades en su lenguaje no verbal.
Así que ya sabéis, si queréis disfrutar de una vida más saludable, no os olvidéis de darle al play cada día y escuchar la música que tanto os gusta.