La crioterapia de cuerpo entero ha dejado de ser un exclusivo privilegio de deportistas de élite para convertirse en una herramienta indispensable para muchos en el ámbito empresarial y la salud. Con la creciente necesidad de gestionar la energía de forma estratégica, Bluezone, en Mallorca, emerge como uno de los centros más destacados de Europa para este tratamiento.
Integrado con Elite Sports Mallorca, Bluezone combina el alto rendimiento deportivo con prácticas de regeneración avanzada. Su enfoque se basa en el Total Systemic Method (TSM), un protocolo que, según explica Rainer Bolsinger, CMO de Art of Cryo, ha transformado las expectativas del mercado. Este método no sólo prioriza la relajación, sino que se centra en la regulación del cuerpo, utilizando ingeniería alemana y un diseño multisensorial para ofrecer resultados medibles en menos de 30 minutos.
A la vanguardia de los centros de crioterapia en Europa, Bluezone no está solo en su empeño por proporcionar un entorno óptimo para la regeneración. Otros centros destacados incluyen Coolzoone en Madeira, que alberga la cámara de crioterapia más grande del mundo, y Cryodukt en Zúrich, que combina el TSM con experiencias como las «Cryo Races».
En esta tendencia de integración entre la tecnología, la ciencia y el bienestar, es notable como estos centros se enfocan en las necesidades de diversas comunidades, desde atletas hasta inversores y biohackers, buscando mejoras tangibles en su rendimiento físico y mental.
Con estas innovaciones, la crioterapia avanza hacia un futuro en el que no solo se trata de recuperación, sino también de optimización del rendimiento en un entorno cada vez más competitivo.
