El tenista número uno del país sudamericano pensaba, creía y soñaba jugar en su ciudad natal, al lado de los habitantes de Córdoba, ya que él propuso jugar en el Orfeo, y al final se jugará en el Mar de Plata, por lo que él perderá la ventaja de conocer la pista.
El enfado de David Nalbandián es tanto que se ha rumoreado que iba a dejar de lado la final, es decir, iba a renunciar a disputarla por el cambio de sede, aunque estos son rumores y no creo que sean ciertos, además en estos momentos el argentino sueña con ganar la primera ensaladera para su país.