La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha vuelto a declarar el mpox, anteriormente conocido como viruela del mono, como una emergencia de salud pública internacional debido a la rápida propagación de una nueva cepa del virus. Este anuncio se produce casi un año después de que la OMS anunciara el final de una emergencia anterior relacionada con esta enfermedad el 11 de mayo de 2023, cuando el número de casos había disminuido considerablemente.
El mpox, que se originó en la República Democrática del Congo en 1970, ha estado disparándose en diferentes partes del mundo, lo que llevó a la organización a actuar de manera decisiva para evitar que la situación empeore. Según la OMS, el mpox se transmite principalmente a través del contacto íntimo entre personas, aunque también puede propagarse a través de objetos y superficies contaminadas por alguien infectado.
Los síntomas del mpox incluyen erupciones cutáneas que pueden comenzar con fiebre y seguir con malestar general, incluyendo dolor de cabeza y muscular. Estas erupciones pueden aparecer en distintas partes del cuerpo, incluyendo la cara, las palmas de las manos y las plantas de los pies, y pueden variar en número desde unas pocas hasta miles. La duración de la enfermedad puede extenderse de dos a cuatro semanas, y es crucial que las personas infectadas eviten el contacto cercano con los demás hasta que todas las lesiones hayan sanado.
La transmisión de mpox puede ocurrir no solo entre personas, sino también de humanos a animales y viceversa. Esto subraya la importancia de evitar el contacto físico con animales, especialmente en entornos donde se ha reportado la enfermedad. Además, aunque el riesgo de mortalidad es relativamente bajo, entre el 0,1% y el 10% de las infecciones pueden resultar fatales, particularmente en grupos vulnerables como recién nacidos, mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunitarios comprometidos.
En cuanto a la prevención, se están utilizando varias vacunas aprobadas para el mpox, aunque la OMS desaconseja la vacunación masiva, recomendando en su lugar que la inmunización se limite a las personas en riesgo de exposición. Se sugiere también tomar medidas de higiene, como la limpieza de superficies y desinfección, y cocinar bien la carne que provenga de animales que puedan ser portadores del virus.
El mpox se presenta como una nueva preocupación en un mundo que todavía está lidiando con las secuelas de la pandemia de COVID-19 y recuerda los retos que plantearon otros brotes en el pasado, como el VIH. Con el aumento reciente de contagios, especialmente en África, la OMS ha instado a la comunidad internacional a actuar con rapidez para contener la propagación de esta peligrosa enfermedad. Las autoridades sanitarias están en alerta y trabajan en la estrategia de respuesta para mitigar la amenaza que representa el mpox para la salud pública global.
Fuente: ONU noticias Salud
