La reciente escalada de la ofensiva israelí contra Hezbollá ha dejado un saldo devastador en Líbano, con más de 200 niños muertos y alrededor de 1,100 heridos en los últimos dos meses, según un informe de UNICEF. El portavoz de la organización, James Elder, subrayó que en este periodo han sido asesinados una media de tres niños diarios, lo que suma a un contexto ya trágico, dado que muchos más menores han experimentado heridas o traumas psicológicos.
La violencia en Líbano ha generado lo que Elder describe como una «normalización silenciosa del horror» para los niños, algo que también recuerda a la angustiante situación en Gaza. La guerra ha obligado a cientos de miles de personas a dejar sus hogares, mientras los ataques aéreos israelíes han tomado como blancos infraestructuras vitales, agravando la crisis humanitaria en la región. Según la Organización Internacional para las Migraciones, al menos 878,000 personas han sido desplazadas en Líbano debido a esta violencia.
Por otro lado, la Fuerza Provisional de la ONU en Líbano (UNIFIL) ha informado sobre incursiones israelíes más profundas en territorio libanés, señalando que pueblos enteros, como Kfar Kila y Maroun al-Ras, han sido destruidos a causa de estas operaciones. Desde el inicio del conflicto el 8 de octubre de 2023, más de 3,500 personas han perdido la vida y alrededor de 15,000 han resultando heridas, según las autoridades locales.
La intensidad de los combates ha aumentado, y las hostilidades se han extendido a lo largo de la Línea Azul, la frontera patrullada por la ONU entre ambos países. Este conflicto se caracteriza por ataques aéreos constantes y el uso de misiles, que, según los informes, han generado una destrucción generalizada a ambos lados de la frontera.
El portavoz de UNIFIL destacó que la situación es alarmante, llamando la atención sobre la falta de respuesta a los llamados a un cese del fuego. El secretario general adjunto de la ONU para las Operaciones de Paz, Jean-Pierre Lacroix, quien visitó recientemente Líbano e Israel, confirmó que varios incidentes han afectado a las fuerzas de paz, incluido un ataque que dejó a cuatro cascos azules ligeramente heridos.
Lacroix se reunió con líderes políticos libaneses y funcionarios israelíes para evaluar estrategias para garantizar la seguridad de las fuerzas de la ONU y explorar la posibilidad de un alto el fuego. Sin embargo, reconoció que, aunque se está trabajando en una propuesta de negociación, el resultado permanece incierto. La situación en la región sigue siendo crítica, y el costo humano del conflicto es considerado inimaginable.
Fuente: ONU últimas noticias