Parece que la muerte de un protestante vale menos que una carrera de Fórmula 1, o así no los hace ver la FIA. Eso sí, por lo menos hacen creernos que tienen conciencia porque según ellos son conscientes de las resvueltas en el país.
Lamentablemente, el año pasado ya se tuvo que suspender la disputa del GP en Bahréin por la magnitud de las revueltas en el país. Este año, al parecer, las revueltas son de menor calibre y no disputar el GP no es una opción.
Según palabras textuales de la FIA:
La FIA es el garante de la seguridad en la carrera y se apoya, al igual que en cualquier otro país, en las autoridades locales para que garanticen la seguridad. Las máximas autoridades de Bahréin nos han asegurado repetidamente que todos los temas de seguridad están bajo control. La FIA está supervisando y evaluando constantemente la situación en el Reino de Bahrein.
Claro, mirando siempre al lado equivocado del problema. Si todo sigue tal cual está previsto, la carrera se disputará el próximo 22 de abril, después del GP de China. Según las autoridades locales y los gerentes del circuito, la carrera trae a la región unos ingresos directos de unos 200 millones de euros, e indirectamente preven que se ingresen en torno a 400-500 millones de euros.
Ya sabéis cual es el precio de una vida.
Vía AS
