En Le Mans se volvió a ver que Jorge Lorenzo sigue mojando la oreja a Rossi, pero el mallorquín tiene que tener mucho cuidado con el italiano, porque es perro viejo y no está a tanta distancia de él, y cualquier fallo puede permitir que el italiano consiga nuevamente el liderato del mundial en Motogp, pero mientras tanto Jorge Lorenzo tiene que disfrutar de este momento, porque en Francia sumó la segunda victoria de forma consecutiva y …. ¡que siga la fiesta!.
En esta ocasión Jorge Lorenzo cambió el baño en el charco de Cataluña, por unas palomitas y una silla, y es que el piloto mallorquín celebró la victoria sentado en una silla, viendo la repetición de la carrera y comiendo palomitas, mientras que Valentino Rossi volvía a ser segundo, por delante de un sorprendete Capirossi, que aprovechó la debilidad de Dani Pedrosa, que una vez más fue de más a menos y se quedó fuera del podio, y encima adelantado por su compañero y Hayden, que fue cuarto en la carrera.
Otro piloto que acabó decepcionado por su actuación, incluso con lágrimas en los ojos fue Casey Stoner, por segunda vez consecutiva se fue al suelo, y prácticamente ha dicho adiós al mundial de una forma muy dolorosa, ahora le tocará arriesgar y mucho, para poder alcanzar a los dos pilotos de Yamaha, que están llamados a pelear por el título.