En un contexto de estancamientos en la 30ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, el Secretario General de la ONU, António Guterres, ha llamado a los negociadores a mostrar la «voluntad y flexibilidad» necesarias para alcanzar resultados que protejan a la población y mantengan viva la meta de limitar el calentamiento global a 1.5°C. Durante una conversación con periodistas en Belém, Brasil, Guterres pidió un acuerdo «justo» y concreto sobre la financiación para la adaptación, así como compromisos creíbles para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Guterres destacó la importancia del liderazgo, la audacia y la buena fe entre los ministros y negociadores, exigiendo que el 1.5°C se considere como la «única línea roja no negociable». Instó a las delegaciones a priorizar la ciencia y el bienestar de las personas sobre la búsqueda de ganancias, asegurando que «el mundo está observando Belém». Con relación a la adaptación, el Secretario General subrayó la necesidad de triplicar la financiación para 2030, señalando que para millones de personas, la adaptación puede significar la diferencia entre «volver a plantar o pasar hambre».
Otro tema central en las negociaciones es la eliminación progresiva de los combustibles fósiles, que representa el 80% de las emisiones globales. Guterres abogó por una transición «justa, ordenada y equitativa» hacia las energías renovables y pidió el fin de las distorsiones del mercado que benefician a los combustibles fósiles. Reiteró que abordar esta transición es fundamental no solo para el medio ambiente, sino también para garantizar la estabilidad económica y la seguridad energética.
Por su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, propuso la creación de una «hoja de ruta» que guíe la transición energética, enfatizando que cada país debe tener la libertad de decidir sobre su propio marco temporal y capacidades. Lula aseguró que es fundamental reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y que, aunque Brasil es un país productor de petróleo, también es un líder en el uso de etanol y biodiésel.
El presidente brasileño añadió que para lograr una transición genuina, las compañías petroleras y los sectores más adinerados deben asumir su responsabilidad. Además, hizo un llamado a los bancos multilaterales para que reduzcan las tasas de interés impuestas a naciones africanas y a países más pobres de América Latina, sugiriendo que deberían convertir parte de esas deudas en inversiones.
En el marco de estos debates, se destacó la participación pública en la COP30, con la participación récord de 3,500 indígenas y una plena representación de mujeres en el evento. Sin embargo, la jornada se vio interrumpida por un incendio en un pabellón del recinto de la conferencia, lo que obligó a una evacuación temporal y causó breves alteraciones en las negociaciones. Afortunadamente, el incendio fue controlado rápidamente y no se reportaron heridos.
Fuente: ONU últimas noticias




