Normalmente cuando alguien se retira se dice que «cuelga» lo que sea que tiene que colgar, su principal herramienta de trabajo. Sin embargo George Lucas siempre ha sido un tipo peculiar y aprovechará su retirada para «rodar películas más personales, de naturaleza experimental, sin tener que preocuparme por su estreno en cines», según ha declarado en la revista Empire. Así pues, el creador de Star Wars e Indiana Jones confirma lo que dejó entrever allá en el mes de enero y se retira del negocio de los grandes estudios para, cito textualmente, «encerrarme en mi garaje para rodar películas como hobby».
La decisión, si bien puede ser chocante, no es ni mucho menos precipitada, ya que Lucas hacía tiempo que decía que estaba cansado de hacer siempre lo mismo, algo que, por otra parte, es culpa suya por decidir dedicarse a amasar dinero retocando, reeditando y ampliando el universo de Star Wars en vez de dedicarse a dirigir películas. Sin embargo sus facetas más prolífica siempre ha sido la de productor, cosa que le ha permitido trabajar en muchos más proyectos y dejar un grandísimo legado de cine fantástico y de aventuras.
Así pues, se nos va (al menos durante un tiempo) uno de los grandes cineastas de la generación de los 70 y uno de los abanderados del New Hollywood. Como despedida nos deja un último film de aventuras, Red Tails, que se estrena este viernes en EEUU.
Hasta luego, Lucas.
