Mientras Israel ha puesto en marcha un controvertido plan de distribución de ayuda humanitaria en Gaza, las agencias de la ONU han advertido sobre la grave necesidad de aumentar los suministros para evitar una crisis de hambruna. Tras un bloqueo total que duró casi tres meses, la semana pasada se permitió la entrada de ayuda, aunque esta ha sido calificada como «extremadamente insuficiente» por el portavoz de la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria (OCHA).
Jens Laerke, en una reciente conferencia de prensa en Ginebra, subrayó que la ONU no está involucrada en el mencionado plan israelí, conocido como Fondo Humanitario para Gaza. “La ayuda debe entrar. Es una distracción de lo que realmente se necesita», enfatizó, pidiendo la reapertura de todos los cruces hacia Gaza y una mayor agilidad en los permisos para la entrada de suministros vitales.
Laerke también destacó las dificultades que enfrentan los equipos de ayuda para recoger y enviar suministros, debido a las rutas inseguras impuestas por las autoridades israelíes. “No siempre podemos recoger lo que se entrega al otro lado”, afirmó.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) informó que hasta 294 camiones de ayuda habían llegado a Kerem Shalom desde el puerto de Ashdod, aunque el ritmo de entrega es considerado demasiado lento para cubrir las necesidades urgentes de la población en Gaza. «Las familias están al borde del colapso», indicó el PMA, a medida que los combates se intensifican y las órdenes de evacuación desplazan a más personas.
Por su parte, la Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA) reportó que “ningún suministro” organizado por su personal ha llegado a Gaza desde el inicio del asedio israelí el 2 de marzo, a pesar de tener listas más de 3,000 camiones con alimentos y medicamentos en Jordania y Egipto. Juliette Touma, directora de Comunicaciones de UNRWA, advirtió sobre el agotamiento de medicamentos básicos en sus clínicas, poniendo en riesgo el bienestar de quienes dependen de estos servicios.
En un contexto de tensiones crecientes, el comisionado general de UNRWA, Philippe Lazzarini, hizo un llamado al gobierno israelí para que presente pruebas que respalden las acusaciones sobre la supuesta implicación de personal de la agencia en ataques del 7 de octubre. A pesar de las investigaciones que han refutado tales aseveraciones, no se ha proporcionado evidencia concreta que sustente los cargos.
El difícil panorama humanitario en Gaza sigue siendo motivo de preocupación creciente, mientras las organizaciones internacionales insisten en la necesidad urgente de facilitar el flujo de ayuda sin restricciones. Sin un aumento substancial en los suministros, la amenaza de una crisis humanitaria se hace cada vez más inminente.
Fuente: ONU últimas noticias