La Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó el pasado jueves una resolución que exige un alto el fuego inmediato, incondicional y permanente en Gaza, así como la liberación de todos los rehenes y la entrada de ayuda humanitaria sin restricciones. El texto, impulsado por España y Palestina, recibió el apoyo de 149 países, mientras que 12 votaron en contra, incluyendo Estados Unidos e Israel, y 19 se abstuvieron.
El embajador de España ante la ONU, Héctor Gómez Hernández, subrayó la urgencia de que la comunidad internacional envié un mensaje claro sobre la situación en Gaza. La resolución no solo busca garantizar el acceso a ayuda humanitaria en el territorio, sino que también reafirma el compromiso con una solución de dos Estados y condena planes que puedan llevar a cambios demográficos en la región.
El documento también condena el uso del hambre como arma de guerra y resalta la necesidad de que Israel rinda cuentas. Los Estados que apoyan la resolución exigen el levantamiento inmediato del asedio y la apertura de todos los pasos fronterizos para facilitar el acceso humanitario. Se enfatiza que, como potencia ocupante, Israel está obligado a permitir que la asistencia llegue a la población necesitada.
El embajador de Palestina ante la ONU, Ryad Mansour, denunció los abusos sufridos por los gazatíes e hizo un llamado a la comunidad internacional para que actúe contra lo que calificó de genocidio. Mansour enfatizó que la prolongación del conflicto no se resolverá con más violencia y que es esencial respetar los derechos fundamentales de los palestinos.
Por su parte, el representante de Israel ante la ONU, Danny Danon, argumentó que la resolución no avanza hacia la paz y criticó la ausencia de una condena a Hamas, que aún tiene a 53 rehenes israelíes en su poder. Desde su perspectiva, el enfoque debería ser asegurar la liberación de los rehenes en lugar de aprobar un texto que no vincula el alto el fuego a su liberación.
Rusia respaldó la resolución, argumentando que proporciona objetivos humanitarios clave y aboga por un futuro donde no haya desplazamientos forzados ni violencia. El embajador ruso, Vasily Nebenzya, lamentó el alto número de muertes palestinas desde octubre de 2023 y llamó a la comunidad internacional a actuar para detener lo que calificó de masacre.
En contraste, Estados Unidos expresó su desacuerdo con la resolución, señalando que premia a Hamas y criticando la falta de condena hacia ese grupo. Según la embajadora interina estadounidense, Dorothy Shea, la paz duradera solo se logrará mediante negociaciones directas.
La sesión en la que se aprobó la resolución fue una de emergencia, respondiendo a la inacción del Consejo de Seguridad de la ONU, que no ha logrado abordar la guerra en Gaza ante la reciente paralización por vetos estadounidenses. La resolución marca un paso significativo en un conflicto que ha generado una grave crisis humanitaria en la región, y expresa el deseo de la comunidad internacional para encontrar una solución pacífica y duradera.
Fuente: ONU últimas noticias
