Roger Federer busca su sexto US Open, y todos consecutivos, es decir no conoce la derrota en este Grand slam desde hace muchos años, ante un Juan Martín Del Potro que dio la «sorpresa» en la otra semifinal, ya que ganó a un Rafa Nadal que no levanta la cabeza por culpa de las lesiones, sobretodo los abdominales, que le han dolido desde que llegó al país americano.
El suizo demostró ayer que está en un momento dulce del año, que es el mejor tenista en estos momentos (y de la historia) derrotando a Novak Djokovic, y eso que el serbio estaba muy bien e hizo un partidazo, pero insuficiente cuando tienes delante a Roger Federer, capaz de hacerte un punto entre las piernas y de espaldas para práticamente cerrar el encuentro.
Juan Martín Del Potro sabe que no puede fallar en su primera final del US Open, la primera vez que tiene la posibilidad de levantar uno de los cuatro grandes, y sobretodo de dar un golpe en la mesa y avisar a Djokovic, Nadal, Murray y Federer que está ahí y que no se va a arrugar.
El argentino tiene que hacer un partido como el de ayer ante Nadal, prácticamente perfecto y rápido, sin dejar que Nadal entrara en el encuentro, por eso el triple 6-2.
