España se ha presentado en el Mundial de balonmano de Suecia con mucha cautela, partiendo con unas aspiraciones más o menos asequibles y sin fijarse metas demasiado altas que llenan de presión a los jugadores; quizás esta ausencia de sentirse favoritos es la que está haciendo que la selección de Valero Rivera esté creciendo poco a poco en su juego, mejorando en defensa y puliendo su ataque, algo que se confirmó ayer con su clara victoria ante Egipto por 31-18, la que ha hecho que se aseguren la segunda plaza del grupo A.
Todo lo logrado hasta el día de ayer está muy bien, pero esta noche a las 20:45 comienza el Mundial de verdad, pues se miden a la actual campeona Francia para determinar quien es el primero del grupo A, y después de este partido comienza la fase 2, en la que todo es a vida o muerte, pues sólo los 2 primeros se clasificarán para semifinales.
Esta noche España tiene la suerte de jugar ante los campeones, algo que les da tranquilidad y motivación, pues Francia es la actual campeona y una de las máximas favoritas al título por lo que la presión corre sobre ellos y eso también es una motivación extra para los nuestros que de ganar tendrían mucho camino andado hacia semifinales.